El uso de las baterías de Iones de litio, está actualmente muy extendido a escala mundial. Algunos de los campos de aplicación son: Coches eléctricos, Carretillas elevadoras, Autobuses, almacenaje de energía procedente de placas solares y electrónica de consumo.
Debido a su tecnología pueden llegar a ser productos peligrosos, en especial durante el proceso de carga, o si se exponen a temperaturas superiores a 60ºC, llegando incluso a producir combustiones espontáneas produciendo hasta más de 100 gases tóxicos y/o explosivos, entre los que encuentran H2, CO, CO2, O2, CH4, C2H4, C2H6, C3H8, entre otros.
A este problema se suma la dificultad de extinción de este tipo de incendios si llegan a producirse. Es por ello de vital importancia la detección temprana de algunos de los gases que se generan en los momentos iniciales de estas reacciones, principalmente H2, CO y CO2.
Para intentar minimizar estos riesgos, DURÁN ELECTRÓNICA ha desarrollado unos equipos para la detección temprana de Hidrógeno que forman parte de la familia de productos DURTOX y STANDGAS. Incorporan una celda electroquímica capaz de medir cantidades muy pequeñas de este gas (a partir de 0 ppm y hasta 500ppm). Esta tecnología nos permite superar en rapidez y precisión a otras, como la detección mediante pellistores o perlas catalíticas, que empiezan a medir a partir de 200ppm-400ppm y a la vez son más dependientes de los cambios de temperatura y humedad del ambiente, permitiendo así adelantar las medidas correctoras necesarias para evitar situaciones más peligrosas.